Pasamos la mayor parte de nuestra vida durmiendo, especialmente durante la infancia. El sueño es muy importante para el desarrollo saludable de los bebés. A veces, para enseñar a los bebés a dormir y ayudarlos a dormir solos, se les enseña a dormir sin acercarse a ellos incluso si lloran. Aunque esta es una práctica incorrecta para el desarrollo psicosocial del niño, también puede causar muchos problemas en el futuro.
Los seres humanos somos seres biopsicosociales. Aunque la mayoría de los adultos no quieren estar solos, esto es extremadamente importante para el bebé. Es una práctica errónea ayudar al bebé a aprender a dormir no acudiendo a él aunque llore cuando su ego está extremadamente débil, es decir, entre los 4 y 5 meses de edad. El bebé empieza a llorar y luego deja de llorar al cabo de un rato, los padres piensan que el bebé se ha acostumbrado a esta situación y ha aprendido a conciliar el sueño cómodamente, pero lo que en realidad sucede es que el bebé no aprende a dormir de esta manera sino que aprende una impotencia aprendida. El bebé, que se queda solo en la habitación, elige un objeto abstracto y aburrido, como un juguete, para satisfacer su necesidad de apoyo y seguridad, ya que no hay ningún padre cerca, e intenta calmarse con la seguridad de que "está bien". aquí" y "no se va".
Entonces, ¿qué debes hacer cuando tu bebé llora?
El llanto es un mensaje, es necesario Valora muy bien este mensaje. Imagina que un adulto está llorando en la habitación, inmediatamente quieres ir hacia él y descubrir qué pasó. Dado que su bebé no puede expresarse verbalmente, expresa sus deseos llorando, y los mensajes que provienen del bebé deben evaluarse cuidadosamente, al igual que un adulto.
En primer lugar, se debe examinar si hay un problema médico-fisiológico que afectará al sueño. Pañal sucio, hambre de estómago, fiebre, gases, reflujo, etc. Si hay algún problema fisiológico-médico, estos deben solucionarse primero. Los rituales realizados antes de ir a dormir facilitan un sueño confortable. Tomar una ducha tibia, amamantar o alimentar con biberón, masajes, música relajante o un ritual diferente que tú y tu bebé creen pueden ayudar a facilitar la transición al sueño.
Dormir es importante durante el primer año: significa relajarse. y tranquilizándose. Después de un tiempo, la capacidad del cuidador para mantener la calma mejora la capacidad de autocalmarse del bebé. . Cuanto más tranquilo y cómodo esté el cuidador, más tranquilo permanecerá el bebé. Tener padres que lo apoyen y lo tranquilicen cuando llora y que satisfagan sus necesidades es muy importante tanto para un sueño saludable como para un desarrollo psicosocial saludable.
Leer: 0