Aunque el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es el problema mental más común en los niños, se sabe poco al respecto. Hay muchos errores u omisiones entre lo que se sabe. Por eso hoy quiero escribir brevemente lo que sabemos sobre el TDAH.
La falta de atención no significa no poder prestar atención a nada.
El nombre de la enfermedad a veces provoca malentendidos. Lo que se entiende por déficit de atención es la incapacidad de gestionar correctamente la atención. El niño o joven presta excesiva atención a actividades divertidas y estimulantes (tableta, televisión) y puede pasar horas delante de ellas, pero no puede prestar atención a los deberes o áreas de tareas durante mucho tiempo y se aburre rápidamente. Las familias suelen describir esto como "Es muy cuidadoso cuando le conviene y descuidado cuando no le conviene". El déficit de atención no significa que la atención sea siempre mala.
La hiperactividad no se da en todos los niños.
Como decíamos, esta situación también provoca problemas con hiperactividad. Sólo el 15% de los niños con TDAH tienen problemas de conducta que pueden describirse como hiperactividad. La hiperactividad es un síntoma común en la primera infancia pero que disminuye gradualmente. Por tanto, los principales síntomas considerados a la hora de diagnosticar el TDAH son los problemas de atención y control de los impulsos. Incluso el grupo diagnosticado con TDAH es hipoactivo. Es decir, son niños perezosos, lentos y que sólo tienen problemas de atención. Por este motivo, la hiperactividad no es el hallazgo definitivo para hacer un diagnóstico.
Tienen buena inteligencia.
El TDAH es una enfermedad independiente de la inteligencia. Existe la creencia de que los niños especialmente hiperactivos se comportan de esta manera debido a su gran inteligencia. Un niño diagnosticado con TDAH puede ser superdotado o tener problemas de aprendizaje. La atención y las habilidades ejecutivas se pueden definir como una habilidad separada, y la inteligencia se puede definir como una habilidad separada. Puedes pensar en uno como altura y el otro como peso. No todos los niños altos tienen por qué tener sobrepeso.
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