La enfermedad de la arteria carótida, o como se la conoce popularmente, es uno de los problemas de salud importantes en nuestro país. La arteria carótida es la arteria principal que lleva sangre a nuestro cerebro. En algunos estudios se ha demostrado la presencia de enfermedad de la arteria carótida en casi una de cada cuatro personas mayores de 70 años. Entre los factores de riesgo más importantes se encuentran el tabaquismo, tener más de 70 años, valores elevados de colesterol, hipertensión, diabetes y obesidad. Dado que las enfermedades vasculares son enfermedades comunes y sistémicas, pueden estar asociadas con enfermedades cardiovasculares y otras enfermedades arteriales. La enfermedad tiene un curso insidioso, pero sus consecuencias son graves. Puede provocar condiciones clínicas que pueden provocar ceguera repentina, parálisis temporal o permanente e incluso la muerte de los pacientes. Diagnóstico: El examen ecográfico en pacientes con sospecha de enfermedad es suficiente para el diagnóstico. Si se requiere una intervención u operación distinta a la farmacoterapia, la tomografía o la angiografía guiarán al cirujano vascular. Tratamiento: El enfoque principal del tratamiento es minimizar el riesgo de accidente cerebrovascular. Para ello son importantes los seguimientos periódicos por parte del cirujano vascular. Además de diversos tratamientos anticoagulantes, la regulación de la presión arterial y el azúcar en sangre son de gran importancia. Además, en estos pacientes se deben añadir al tratamiento fármacos reductores del colesterol con recomendación del médico. En caso de un alto riesgo de accidente cerebrovascular o desarrollo de un accidente cerebrovascular, se pueden aplicar métodos intervencionistas o quirúrgicos que el cirujano vascular considere apropiados. El método intervencionista se basa en la detección de la zona con estenosis grave mediante angiografía y la eliminación de la estenosis mediante la colocación de un stent allí. El tratamiento quirúrgico se basa en el principio de abrir el vaso carotídeo y eliminar completamente la placa que se estrecha. Este procedimiento se llama endarterectomía carotídea.
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