Está bien si no como nada hasta la cena, pero, ¿no tengo nada que comer esa noche? Si eres de los que lo dice, ¡este artículo es para ti! Lo que conocemos como síndrome de alimentación nocturna es un deseo interminable de consumir snacks que comienza con la cena y continúa hasta la hora de acostarse. De hecho, podemos llamarlo un tipo de trastorno alimentario. Entonces, ¿cómo prevenimos esto? ¿Es posible eliminar la comida por la noche? Por supuesto….
En primer lugar, debemos saber que se trata de un círculo vicioso. Cuando empiezas a comer por la noche, te despiertas lleno por la mañana. La vida empieza bien sin desayunar por la mañana. Porque comiste por la noche y no necesitas comer por la mañana. Como no se pueden satisfacer las necesidades del cuerpo que empieza a trabajar por la mañana, la tasa metabólica comienza a disminuir. A medida que el nivel de azúcar en la sangre baja por la tarde, poco a poco intentas hacer frente a los antojos de dulces y los ataques de carbohidratos. Crees que has superado estos ataques gracias al ajetreado ritmo del día, y cuando llegas a casa por la noche y empiezas a comer, te das cuenta de que no puedes conseguir suficiente. Así comienza la adicción nocturna al frigorífico. Entonces, si este es el caso, ¿cómo puedo editarlo? Antes que nada, ¡dale a tu cuerpo lo que necesita durante el día y desayuna para que tu metabolismo no se frene! Luego, añade un buen refrigerio entre las 15:00 y las 17:00, cuando el nivel de azúcar en sangre y la serotonina (hormona de la felicidad) son más bajos, para evitar comer por la noche. De esta forma cerrarás la página de comida con la cena, ya que no sentirás la necesidad de picar por la noche.
En realidad, el problema se soluciona con un buen desayuno y una merienda equilibrada por la tarde. Si te sientes como un ratón de frigorífico, te sugiero que pruebes a organizar tú mismo esta comida.
Te deseo días en los que tengas el cuerpo que sueñas.
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