La relación entre madre y bebé comienza mientras el bebé aún está en el útero. La salud psicológica y física de la madre después del nacimiento es muy importante en la relación con su bebé. El malestar físico de la madre por las dificultades durante el parto puede dificultarle el vínculo con su bebé. Reunir al bebé con la madre inmediatamente después del nacimiento es muy importante para la relación entre ellos. El contacto del bebé con la piel de su madre hasta 1 hora después del nacimiento aumentará el vínculo entre ellos.
El hecho de que madre y bebé estén juntos e interactúen fortalece el vínculo entre ellos. Cuando los bebés nacen por primera vez, aún no pueden adaptarse al mundo y todavía se sienten como si estuvieran en el útero por un tiempo. Por eso los bebés necesitan más a sus madres, especialmente en los primeros meses. Siempre quieren estar en los brazos de su madre, oler el aroma de su madre y sentir su piel. Esta es una condición normal que se encuentra frecuentemente en los bebés recién nacidos. Este proceso es la fase de adaptación del bebé al mundo. Durante este período, los bebés sólo pueden comunicarse llorando, al llorar demuestran que tienen hambre, sueño o simplemente lloran porque extrañan a sus madres. En tales casos, la madre puede cargar a su bebé y hablarle porque los bebés pueden distinguir las voces de su madre de otros sonidos.
Durante este período, se debe cargar al bebé cada vez que llore porque el bebé se calma. cuando huele a su madre. Así, el bebé tendrá un periodo más tranquilo y pacífico.
Los bebés empiezan a distinguir las voces de su madre y de su padre mientras están en el útero. Escuchar las voces de la madre y el padre consolará al bebé durante la fase de adaptación al mundo, por lo que los padres deben hablar con el bebé con frecuencia.
Cuando el bebé tiene aproximadamente 3 semanas, se vuelve más animado, eso es decir, el tiempo que permanece despierto aumenta y empieza a balbucear. Al mismo tiempo, especialmente cuando escucha la voz de su madre, se queda en silencio y comienza a escuchar la voz. En tales casos, es muy importante que la madre converse con el bebé para fortalecer el vínculo entre ellos. Según el artículo de Goodfriend, el bebé se siente más en paz cuando escucha la voz de su madre y sonríe. También se ha afirmado que el desarrollo se ralentiza en los bebés que son separados de sus madres inmediatamente después del nacimiento.
Al final del primer mes, los bebés pueden reaccionar a las sonrisas y emitir sonidos distintos al llanto. Puede centrarse en la cara. Por lo tanto, comunicarse con el bebé de estas formas es muy importante para el vínculo entre el bebé y la madre. Los bebés necesitan el amor de su madre tanto como necesitan alimento. Es importante que las madres besen, abracen y contacten a sus bebés para el desarrollo del bebé.
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