Es un método de diagnóstico que se utiliza para ver directamente el interior del esófago, el estómago y el duodeno. Con el procedimiento de gastroscopia se puede tomar una muestra de tejido (biopsia) con un alambre fino enviado a través del gastroscopio, extirpar el pólipo (polipectomía) e intervenir las zonas sangrantes (escleroterapia, sonda térmica).
¿Cuándo puede ser necesaria la gastroscopia?
Sangrado del sistema digestivo superior Ingestión de cuerpos extraños (dinero, batería, etc.) Ingestión accidental de irritantes Trastornos de la deglución Quejas continuas del sistema digestivo superior Para dilatación esofágica y pilórica Para aquellos con una historia del tejido de Barret Para el seguimiento de las úlceras de estómago y esófago
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