Los hábitos nutricionales de una persona desempeñan un papel importante en la formación de cálculos. Por lo tanto, parece posible prevenir la formación de cálculos prestando atención a la dieta. A continuación se enumeran las recomendaciones dietéticas que provocan o previenen la formación de cálculos en una persona:
•Beber mucho líquido (2,5 litros al día), principalmente agua, previene la formación de cálculos.
•Es necesario evitar bebidas azucaradas y ácidas que alteren el equilibrio ácido-base en la orina. Las bebidas con citrato generalmente previenen la formación de cálculos.
•El jugo de toronja, naranja y manzana puede aumentar el riesgo de padecer cálculos. Por otro lado, el jugo de limón puro tiene un efecto protector contra los cálculos de calcio debido al ácido cítrico que contiene.
•No consumir leche y productos lácteos aumenta el riesgo de formación de cálculos. Por tanto, no se deben aplicar dietas carentes de calcio. También se deben consumir en cantidades razonables alimentos como leche, yogur y queso.
•Elegir alimentos ricos en fibra reduce el riesgo de formación de cálculos.
•Remolacha con alto contenido de oxalatos. No se debe consumir en exceso alimentos como soja, té negro, chocolate, cacao, higos secos, pimienta negra, avellanas, perejil, semillas de amapola, espinacas, fresas y moras.
•Úrico. Para prevenir los cálculos ácidos es necesario restringir el consumo de alimentos tipo vísceras y carnes que contengan purinas.
•Reducir el consumo de sal también reduce el riesgo de formación de cálculos.
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