La insuficiencia cardíaca es una afección que se produce como resultado de la pérdida de la función contráctil del músculo cardíaco. Los pacientes que padecen insuficiencia cardíaca se quejan de dificultad para respirar, tos, hinchazón de los pies y debilidad. Si bien estas molestias son muy leves en las etapas iniciales, en períodos posteriores el paciente ya no puede permanecer acostado debido a la dificultad para respirar. La hipertensión y las enfermedades coronarias son las causas más comunes de insuficiencia cardíaca. La insuficiencia cardíaca también puede ocurrir en enfermedades directas del músculo cardíaco. En la última década se han logrado grandes avances con los fármacos utilizados en el tratamiento de la insuficiencia cardíaca.
Gracias a los fármacos se han reducido tanto las quejas como las muertes debidas. a insuficiencia cardíaca han disminuido. Pero después de cierto tiempo, los medicamentos no ayudan. A pesar de los medicamentos, los pacientes siguen quejándose de dificultad para respirar. A estos pacientes se les puede ayudar más con tratamientos no farmacológicos que han surgido en los últimos años. Uno de los tratamientos no farmacológicos utilizados en la insuficiencia cardíaca son los marcapasos. Se ha demostrado que, especialmente en un grupo de pacientes, se redujeron las molestias y se prolongó la esperanza de vida con el uso de baterías de tres electrodos (bivetriculares). Algunos pacientes seleccionados se benefician enormemente de este método llamado terapia de resincronización cardíaca (se requiere la opinión de un médico sobre quién se beneficiará y cuánto). Otra opción de tratamiento es el método llamado EECP. En este método, se aplica presión en estas áreas simultáneamente con los latidos del corazón a través de bolsas de aire que se envuelven alrededor de las piernas y las caderas. Al final de 35 sesiones, cada una con una duración media de una hora, las molestias disminuyen en una parte importante de los pacientes.
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