El deterioro de la parte interna del tejido del disco causa dolor lumbar y se llama enfermedad degenerativa del disco. Esta situación es diferente de la hernia del tejido discal (hernia de disco). Radiológicamente, en el examen de resonancia magnética, el tejido del disco puede mostrar signos de oscurecimiento (disco negro) en los exámenes T2, y a medida que avanza la degeneración, este oscurecimiento en el disco aumenta y se observa una disminución en la altura del disco entre las vértebras. Es una condición dolorosa. Generalmente se encuentra en el nivel de un solo disco. El diagnóstico se realiza mediante examen clínico, resonancia magnética y discografía.
Si el proceso doloroso en la enfermedad degenerativa del disco continúa durante más de 6 meses y si el dolor no desaparece y persiste a pesar de la fisioterapia y las inyecciones epidurales de esteroides. , puede ser necesaria una cirugía. Porque el dolor lumbar, que se produce como resultado de una enfermedad degenerativa del disco, es una condición perturbadora que altera la calidad de vida. Actualmente, existen dos métodos de tratamiento quirúrgico preferidos en el mundo. La primera es aplicar estabilización dinámica posterior solo entre las vértebras donde se encuentra el disco enfermo, preservando al mismo tiempo el tejido del disco. De esta forma se eliminará o reducirá la carga sobre el disco degenerado, con lo que mejorará el dolor lumbar. Se ha informado en la literatura que el disco se protege con este método y si hay un trastorno del disco no progresivo, hay mejoría radiológica en este tejido del disco. El segundo método es la cirugía de fusión. Aquí, el tejido del disco degenerado se elimina por completo y se reemplaza con tejido óseo o jaulas, seguido de fusión (congelación). Nuevamente, con esta intervención se suma a la cirugía la estabilización posterior.
Las hernias discales (hernia discal) son una situación aparte. Aquí, el tejido llamado núcleo pulposo en la parte interna del tejido del disco puede desgarrar el anillo y ejercer presión sobre los tejidos nerviosos en el canal. En definitiva, es una afección que resulta en pérdida de fuerza y/o sensación en la pierna o el pie. Si hay un déficit neurológico importante como consecuencia de una hernia discal (dolor intenso que no responde al tratamiento médico, pie caído, incontinencia urinaria, pérdida de fuerza y sensibilidad en ambas piernas), puede ser necesaria una cirugía urgente, pero en otros casos , el tratamiento como medicación y fisioterapia suele durar de 4 a 6 semanas, si se aplican los métodos y no hay mejoría o progreso, se puede considerar la cirugía. La práctica estándar en el tratamiento quirúrgico es la discectomía con métodos microquirúrgicos.
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