¿Quién puede someterse a una cirugía de implantes y quién no?

El tratamiento con implantes es un tratamiento que se realiza para restaurar los dientes perdidos por diversos motivos como caries o roturas, tanto a nivel funcional como estético. Podemos llamar implante a una raíz artificial formada por titanio o aleaciones de titanio que imitan la raíz del diente.

La cirugía de implantes dentales es una de las cirugías dentales más seguras y predecibles cuando la realiza un dentista experimentado. Puede aplicarse fácilmente a cualquier adulto cuyo estado de salud general sea bueno o esté bajo control, y asegura la renovación de la apariencia y función de los dientes perdidos una vez completado el proceso de curación. Los riesgos y complicaciones asociados a los implantes dentales en su mayoría ocurren por motivos como no planificar correctamente el caso, no utilizar productos confiables, el médico no tiene suficiente conocimiento y experiencia, o el paciente no sigue las recomendaciones del médico en este proceso.

Una correcta planificación aumenta la calidad del implante. Una altura y un grosor óseos adecuados son de gran importancia para la colocación y la longevidad del implante. El tamaño del hueso y las estructuras anatómicas circundantes deben comprobarse mediante radiografías. En algunos casos puede ser necesario evaluar la estructura ósea en 3 dimensiones mediante la realización de tomografías volumétricas dentales.

¿Para quién está indicado el tratamiento con implantes?

Si no tiene ningún problema de salud que impida la curación, si su estado de salud general es bueno o está bajo control y tiene suficiente estructura ósea, es un candidato adecuado para un implante. No existe un límite de edad superior para el tratamiento con implantes, el límite de edad inferior corresponde al rango de edad de 16 a 18 años, cuando se completa la fase de crecimiento.

¿Quién está en riesgo para el tratamiento con implantes?

Los estudios han observado que pueden ocurrir problemas en el tratamiento con implantes en personas con enfermedad de las encías avanzada y en personas que fuman más de 3 paquetes de cigarrillos. Además, se ha observado que en presencia de diabetes y presión arterial no controladas, en personas muy jóvenes cuyo desarrollo óseo no se ha completado, en personas que han recibido radioterapia en la zona de la cabeza y el cuello durante el último año, en personas que utilizan corticoides o fármacos inmunosupresores, pueden producirse problemas en la unión del implante y el hueso.

Osteoporosis y algunos cánceres. Los fármacos utilizados en el tratamiento de este tipo de enfermedades pueden provocar daños en la estructura ósea, imposibilitando el tratamiento con implantes. Es muy importante que nuestros pacientes compartan en detalle los medicamentos que usan con sus médicos antes del tratamiento con implantes.

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