Cosas que hacer antes de comenzar el tratamiento de FIV

La fecundación in vitro es la técnica de reproducción asistida más eficaz aplicada a parejas diagnosticadas de infertilidad. En otras palabras, el tratamiento de fertilización in vitro es un método de tratamiento que se aplica a parejas que no pueden tener un bebé a pesar de tener relaciones sexuales regulares y sin protección durante un año. El tratamiento de fertilización in vitro es la combinación del óvulo extraído de la mujer y el esperma extraído del hombre en un ambiente de laboratorio, y luego la colocación del embrión resultante en el útero de la futura madre después de 3 a 5 días de seguimiento.

En la primera reunión se toma la historia detallada de las parejas que solicitan la clínica por infertilidad. Luego, a la futura madre se le realiza un examen ginecológico y una ecografía. Con este examen se evalúa la reserva ovárica, el útero y el cuello uterino de la futura madre. Se brinda información sobre las pruebas necesarias para revelar las causas de la infertilidad. Se solicita una película uterina de la futura madre. Se solicita un espermiograma (análisis de semen) al futuro padre. El objetivo de todas estas pruebas es determinar las causas de la infertilidad.

El tratamiento de fecundación in vitro se recomienda en parejas que presenten las siguientes condiciones:

Quienes iniciarán tratamiento de fecundación in vitro Pruebas a solicitar a las parejas:

Mujer:

HbsAg, Anti-VHC, Anti-VIH, TSH, Prolactina, Nivel sérico de AMH, Rubéola IgG, Hemograma y grupo sanguíneo

Hombre:

HbsAg, Anti-VHC , Anti-VIH

Al iniciar el tratamiento de fecundación in vitro se determina el método de tratamiento más adecuado para la pareja. El tratamiento de fertilización in vitro debe iniciarse el segundo o tercer día del período menstrual de la futura madre. Aunque la duración del tratamiento varía según el paciente, dura aproximadamente entre 2 y 2,5 semanas.

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