¡QUE NO FALTE EN NUESTRA MESA EN PRIMAVERA!
Termina el invierno y llega la primavera. El olor a tierra y los colores cambian, la naturaleza comienza a cobrar vida nuevamente. Por eso la primavera es una época de cambios para ti y tus mesas. Con la llegada de la primavera empezarás a consumir muchas frutas y verduras frescas. La primavera es la temporada de desintoxicación más adecuada... Echemos un vistazo juntos y veamos qué hacen las frutas y verduras.
Si buscas alimentos que sean buenos para cada órgano desde la cabeza hasta los pies, las verduras de hojas verde oscuro son exactamente la solución que estás buscando. Las espinacas son ricas en antioxidantes y también contienen betacaroteno, vitamina C y vitamina E. De esta forma, reduce el riesgo de sufrir cataratas y degeneración macular. Además de proteger tus ojos, también crea un efecto desintoxicante. Gracias a la luteína y zeaxantina que contiene, también protege de los efectos nocivos del sol sobre la retina. ¡Es posible hacer una maravillosa ensalada con iceberg o con lechuga y hojas de espinacas!
Una ración de espárragos aporta el 50% de la vitamina K que necesitas. Entonces, ¿qué hace la vitamina K? La vitamina K desempeña un papel en la coagulación de la sangre y el fortalecimiento de los huesos. Fortalece el cabello, la piel y las uñas.
La fresa, una de las frutas más bonitas que puedes consumir a finales de la primavera, también favorece la producción de colágeno gracias a su alto contenido en vitaminas. C que contiene. Colágeno. Es una proteína que hace que la piel luzca joven y saludable. Por su bajo contenido calórico, las fresas son un fantástico snack tanto para diabéticos como para quienes quieren adelgazar.
El puerro contiene elementos que combaten el cáncer. Por eso merece su lugar en nuestras mesas y en muchas recetas. El puerro, que pertenece a la familia de las cebollas, es conocido por su olor acre provocado por los compuestos de azufre. Los estudios de laboratorio muestran que verduras como la cebolla y el puerro contienen compuestos que combaten los elementos cancerígenos. También se sabe que inhibe el crecimiento de células cancerosas. Se ha observado que el riesgo de cáncer es menor en personas que consumen regularmente una verdura del grupo de la cebolla.
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