El hambre y la saciedad son dos mecanismos importantes en la regulación del peso corporal. Incluso si las personas equilibran su ingesta de alimentos por su propia voluntad, existen sistemas en el sistema nervioso central que regulan la ingesta de alimentos y el gasto de energía. La actividad de los centros de hambre/saciedad del cerebro se ve afectada por nutrientes, hormonas y otras moléculas de señalización.
Los cuerpos cetónicos son la principal fuente de energía en caso de hambre o deficiencia de carbohidratos y pueden desempeñar un papel en el control de ingesta de alimentos.
Cetosis. Aunque el mecanismo exacto de la cetosis no se comprende completamente, el efecto positivo de las dietas cetogénicas se ha vuelto popular para perder peso en los últimos años.
Los efectos de la cetosis Se siguen investigando cómo suprimir las señales del apetito, aumentar la sensación de saciedad y reducir la conducta alimentaria. Se conocen datos sobre el fenómeno de la disminución del hambre con las dietas cetogénicas, pero aún no están claros los mecanismos subyacentes.
Aunque es eficaz para perder peso, su eficacia en el periodo medio-largo de la dieta debe gestionarse mediante nutricionistas de forma que no provoque deficiencias de nutrientes. No hay que olvidar que las aplicaciones a largo plazo pueden provocar deficiencias.
Dieta cetogénica; Provoca un estado de cetosis patológico, pero no fisiológico, que se produce a diario. Esta condición no debe confundirse con la cetoacidosis diabética. Este estado de cetosis fisiológica se puede conseguir en ayunas o con una dieta algo reducida en hidratos de carbono (por debajo de 20 g al día).
Por tanto, las dietas cetogénicas son patrones dietéticos que contienen proteínas y grasas con un contenido muy bajo en hidratos de carbono y por tanto calorías muy limitadas. Podemos definirlo.
Esta dieta ha demostrado en estudios a corto plazo provocar pérdida de peso, facilidad en el gasto energético y cambios hormonales que regulan el apetito, pero el programa de nutrición aportado consumiendo 20 gramos de carbohidratos dorados al día es especialmente adecuado para diabéticos y pacientes renales, ya que conlleva grandes riesgos para muchas enfermedades como.
Se necesitan más estudios para explorar los mecanismos de los posibles efectos beneficiosos de las dietas cetogénicas. Como resultado, este enfoque dietético no sólo es saludable. Puede ser una ventana diferente para que las personas que no padecen ninguna enfermedad aumenten su motivación dietética durante un tiempo muy corto o las saquen de su círculo vicioso. Sin embargo, para perder peso equilibrado y mantener el peso ideal, la solución más saludable es comer de forma adecuada y equilibrada, hacer de esto un estilo de vida y elegir una alimentación variada pero moderada.
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