La interacción del bebé con la madre está relacionada con la energía que le da la madre. Cuanto más la madre cuida a su bebé, lo alimenta, lo besa, lo huele y juega con él, más recibe el bebé esta interacción y siente alegría. Esa alegría que surge no proviene del interior del bebé en sí, la interacción dada por la madre hace que el bebé sea alegre.
Las relaciones también son así. Se trata de "interacción mutua". La energía de la madre pasa al bebé y la energía del bebé pasa a la madre. La razón inconsciente del matrimonio es poner fin a la infancia. Como cónyuges, todos queremos satisfacer una necesidad que no fue satisfecha en nuestra infancia, que sanará las heridas que recibimos en nuestra infancia.
Cuando hay una situación que interrumpe la interacción mutua con otra persona, comienza la ansiedad y esta situación es registrada por nuestro cerebro.
Cuando ocurre la ansiedad, comienzan nuestras heridas. Lo que los individuos necesitan es sanar las heridas, confianza, conexión, apego seguro y alegría.
Del discurso monólogo al discurso de diálogo
Tu pareja puede parecerte un monstruo, pero recuerda que dentro hay un niño herido. Si vas a mejorar tu relación será positivo. Cuando la herida existente sana, la relación también sana. Por esta razón, necesitamos aprender qué es escuchar verdaderamente.
Leer: 0