Trastorno reactivo del apego de la infancia o la niñez temprana

El hecho de que los niños que crecen en entornos donde no se les proporciona la atención adecuada tengan dificultades en las relaciones sociales ha atraído la atención de los investigadores desde mediados de siglo. Sin embargo, el desarrollo del diagnóstico del trastorno reactivo del apego es reciente.

En la segunda mitad del primer año de vida, V-XII. Las lealtades selectivas se desarrollan entre meses. Los niños lo demuestran con diversas reacciones emocionales y de comportamiento. V-XII en bebés. La ansiedad ante los extraños y la ansiedad por separación se consideran entre meses como evidencia de apego selectivo. La ansiedad ante los extraños es un síntoma de la relativa continuidad de las representaciones mentales de la madre en el bebé. En la ansiedad por separación, el bebé se siente angustiado cuando se le separa de la madre y empieza a buscarla. Porque las representaciones mentales de la madre no son suficientes para tranquilizar al niño hasta que la madre regresa. Después de los 3 años, los niños pueden recurrir selectivamente a personas secundarias, como la maestra de jardín de infantes, y el período de apego puede continuar hasta los 6 años.

Existe una relación constante y satisfactoria entre madre e hijo, si no se establece una relación estamos hablando de privación materna. El apego sano, que comienza desde el nacimiento, es un factor determinante en la futura relación entre madre e hijo. En los primeros 45 a 60 minutos después del nacimiento, el bebé está despierto y receptivo. El contacto con la madre es muy crítico. La cercanía entre la madre y el bebé durante los primeros tres días del período neonatal es extremadamente importante.

El apego seguro del niño puede verse alterado por diversas razones. Estas razones incluyen las siguientes;

El trastorno de apego reactivo es el único trastorno psiquiátrico de la infancia con una etiología específica. El factor es el cuidado poco saludable. Algunos niños que son separados repentinamente de su madre o del adulto que está en lugar de ésta, y algunos niños internados en una residencia de ancianos, reaccionan primero con un llanto muy intenso y prolongado. Sus gritos no pueden detenerse ni calmarse. Si alguien se les acerca durante un breve período de silencio, empiezan a llorar de nuevo. Cuando se callan, aparece en sus rostros una expresión de cansancio y resentimiento (período de protesta). La alimentación disminuye gradualmente, comienza la pérdida de peso, se detiene el desarrollo físico, se producen vómitos y diarrea. Después de 2-3 semanas comienza una recesión. Se evidencia una apariencia resentida y triste (período de depresión). Después del segundo mes, las reacciones emocionales del niño disminuyen gradualmente y se vuelven embotadas. Se vuelve indiferente al entorno y a quienes se le acercan (período de abstinencia). Si la madre regresa dentro de los tres meses, el bebé se irá recuperando paulatinamente y recuperará su condición anterior. Si la separación dura más de tres meses, la situación no se revierte ni mejora y poco a poco se desarrolla la nostalgia(hospitalismo).

Privación materna a largo plazo o nostalgia del hogar (hospitalismo).strong> Es un síndrome que se observa en niños que son separados de sus familias a una edad temprana y enviados a orfanatos u hospitalizados durante mucho tiempo. La única razón aquí es la privación materna. El niño, que carece de una relación uno a uno con la madre o de un adulto que reemplace a la madre, también carece de nutrición emocional y sensorial. En edades más avanzadas, estas personas tienen dificultades para mantener relaciones a largo plazo.

En niños privados de nutrición emocional y sensorial durante mucho tiempo se observa lo siguiente:

Lo primero a considerar en el tratamiento del trastorno de apego reactivo es la seguridad del niño. Si el entorno del niño es dañino, perjudicial y peligroso para el niño, es necesario sacarlo. La primera decisión que se debe tomar es si el niño será hospitalizado o tratado en su entorno. Generalmente, la estrategia se determina según el mal estado físico y emocional del niño, la presencia de desnutrición y la gravedad de la atención patológica. Generalmente, si hay desnutrición, se requiere hospitalización.

En el tratamiento, se ayudan los esfuerzos de adaptación del niño, al mismo tiempo que se apoya la responsabilidad por su entorno. Están capacitados para convertirse en padres que funcionen mejor.

Lograr un cambio en la relación niño-cuidador puede requerir intervenciones terapéuticas intensivas a largo plazo. Puede involucrar a otros miembros de la familia, así como al niño y a los padres. Existe una amplia variedad de programas de apoyo. Entre ellos se incluyen:

Se pueden realizar terapias de juego, familiares, individuales y grupales . En la terapia de juego, el objetivo debe ser corregir las relaciones objetales del paciente, entablar una relación educativa, ayudar a resolver sus ansiedades y miedos y proporcionarle liberación emocional. El objetivo de la terapia familiar incluye reorganizar las relaciones entre la madre y el padre de una manera que no dañe al niño, ayudar a que las necesidades actuales y futuras del paciente se satisfagan adecuadamente y garantizar la cooperación entre la familia, el niño y el equipo de tratamiento. . Se pueden realizar entrevistas individuales y/o grupales con los miembros de la familia extensa para informar a la familia y apoyar el tratamiento. El programa de tratamiento incluye tratamiento farmacológico para dolencias como enuresis (incontinencia urinaria) e hiperactividad. Se puede considerar.

Si la familia y el entorno son muy patológicos y resistentes a los tratamientos, se debe considerar la colocación del niño con un familiar, la entrega a un cuidador, la adopción o el internamiento en una guardería. Si es inevitable alojar a niños pequeños en jardines de infancia, se deben tomar las precauciones necesarias. Se debe aumentar el número de cuidadores, dividirlos en grupos de 5 a 10 personas y cuidarlos bajo la dirección de una madre cuidadora. Deberían vivir en pequeñas casas separadas en lugar de grandes edificios parecidos a cuarteles. Con todo ello, se debe intentar que la vida diaria del niño sea similar a la vida familiar natural.

Además del cuidado y amor brindado por la madre al niño, especialmente en los primeros años, la calidad y la continuidad de la relación entre el niño y la madre es muy importante. El cónyuge también debe proporcionar un apoyo adecuado a la madre. En sociedades que dan la debida importancia al niño, se brindan a la madre innumerables facilidades. En lugar de conceder el derecho a la jubilación anticipada a una mujer de entre 40 y 45 años con hijos mayores, las facilidades proporcionadas a las madres con hijos en sus primeros años serán una inversión importante para las generaciones futuras.

 

Leer: 0

yodax