Los jóvenes pueden pasar momentos difíciles con una creciente emoción y ansiedad los días previos al examen de acceso a la universidad. Básicamente, ¿qué es la ansiedad? ¿Por qué ocurre? ¿Qué significado le doy a esta situación? Es muy importante concienciar con las respuestas a las preguntas y establecer conexiones con la relación causa-efecto.
Ansiedad, estar ansioso es el nombre que se le da al miedo a una causa incierta. La característica más básica que distingue la ansiedad del miedo es que no es una amenaza física. La respuesta emocional que damos cuando nos sentimos ansiosos no es la misma que nuestra respuesta cuando nos enfrentamos a una amenaza.
De hecho, podemos hablar de las mismas emociones cuando se trata de adolescentes y su estrés por los exámenes. El pensamiento ante los exámenes puede causar “ansiedad de fracaso” en los adolescentes.
Cuando decimos ansiedad ante los exámenes, se puede definir brevemente como una ansiedad intensa que impide el uso eficaz de la información aprendida y provoca una disminución del éxito.
La ansiedad ante los exámenes es una forma especial de ansiedad. Los síntomas de ansiedad son las reacciones emocionales y conductuales que acompañan a la ansiedad por los fracasos.
En la ansiedad ante los exámenes, no es el examen en sí, sino la forma en que la persona percibe el examen lo que genera ansiedad. Por esta razón, algunos jóvenes se sienten muy cómodos y tienen éxito en los exámenes, mientras que otros pueden estar ansiosos y no tener éxito.
Aunque la percepción, los pensamientos sobre el examen y dónde colocamos el examen en nuestras vidas son un detalle muy importante, invisible. Los factores de ansiedad como la actitud familiar y el entorno social son los temas más importantes. El pensamiento de que el examen es la etapa más importante de nuestras vidas, el pensamiento de que si no se logra el éxito en ese examen, el pensamiento de que no podrá lograr el éxito en ningún área de su vida, la expectativa de éxito financiero y el esfuerzo moral y la expectativa de recibirlo a cambio pueden empujar a los jóvenes a una ansiedad y un miedo intensos.
pensamientos subyacentes; alto nivel de expectativa de éxito académico, baja confianza en uno mismo, creencias irracionales, estado de éxito, rasgos de personalidad, falta de planificación, entorno social… etc.
La consideración más importante que se debe inculcar es la evaluación de los intereses, habilidades y hábitos de estudio de los estudiantes y los conocimientos adquiridos mediante los exámenes. El examen no es una prueba de evaluación de la personalidad, solo muestra conocimientos. Medir es una etapa.
Sin embargo, si les inculcamos la conciencia de que el éxito no es la última parada, e incluso que es un proceso, su ansiedad estará en niveles normales.
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