El sistema linfático es uno de los sistemas que mantiene el cuerpo sano.Los vasos linfáticos transportan un líquido transparente rico en proteínas y este líquido se llama líquido linfático.
Este líquido intenta limpiar nuestro organismo transportando sustancias que pueden ser perjudiciales para nuestro organismo, como bacterias, virus y materiales de desecho, si el sistema no puede funcionar por algún motivo, este líquido comienza a salir hacia los espacios tisulares de esa zona y se produce una situación llamada linfedema, el linfedema se divide en primario (congénito) y secundario (posterior), lo vemos con mayor frecuencia en brazos, piernas, tronco, cara o cuello durante y después de los abordajes del tratamiento del cáncer.
Especialmente después de la extirpación de los ganglios linfáticos de la axila después del cáncer de mama, se puede desarrollar linfedema en la mama y el brazo. Los ganglios linfáticos extirpados quirúrgicamente interrumpen el flujo linfático en esa área.
Pero se considera una enfermedad crónica y progresiva, cuyo diagnóstico precoz puede controlarse y prevenir su progresión con fisioterapia.
Síntomas del linfedema
- Hinchazón del área afectada, incluidos los dedos de manos y pies
- Limitación del movimiento en el área afectada
- Escozor y malestar
- Infecciones recurrentes
- Decoloración y dureza de la piel (Fibrosis)
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